Cómo cuidar la piel en verano
La llegada del verano significa vacaciones, placer, sol y playa. Es importante tener en cuenta unos pequeños consejos para mantener la piel saludable a pesar de la exposición al sol, sobre todo para no tener que prescindir de un bronceado natural.
Mantener la piel bronceada y saludable
Por supuesto hay que comenzar con el consejo inevitable de utilizar protectores solares. La protección solar es importantísima a principios de la exposición, cuando nuestra piel todavía está desprotegida naturalmente. Por esto se recomienda utilizar protectores solares mayores a 45 FPS y, en todo caso, bajar la protección solar progresivamente. No obstante, no se recomienda utilizar protección menos a 30 FPS.
Asimismo, se recomienda no exponerse al sol entre las 10 a.m. y las 16 p.m. En esta franja horaria el sol daña nuestra piel de mayor manera, pudiendo producir enfermedades dérmicas como el cáncer de piel.
Consumir vitaminas y agua para reforzar la salud de nuestra piel
La medicina actual nos ofrece píldoras de vitamina A, C y E que son esenciales para mantener la piel saludable y rejuvenecida. Asimismo, el consumo de frutas con estas vitaminas nos permitirá mejorar el aspecto y textura de nuestra piel.
Finalmente, es muy importante mantener la piel hidratada para evitar que la piel asoleada se desprenda del cuerpo. Asimismo, el consumo de agua debe ser mayor, ya que la exposición al sol nos hace transpirar y esto puede causar la deshidratación.